David Alves Jr.
Sea una de las primeras páginas en tu Biblia o una de las últimas, siempre vas a poder encontrar a Jesucristo en cada una de ellas.
La profecía de Jeremías y el libro de Lamentaciones no son la excepción. Al leer esos dos libros, nos damos cuenta de que aún cuando fueron escritos unos 700 años antes del nacimiento de Cristo y que narran eventos muy turbios en la historia de la nación de Israel; Jeremías nos revela claramente a Cristo.
1. Cristo en las experiencias de Jeremías:
i. oveja llevada al matadero (Jer. 11:19; Isa. 53:7)
ii. cortado de la tierra de los vivientes (Jer. 11:19; Isa. 53:8)
iii. lágrimas derramadas por Jerusalén (Jer. 13:17; Luc. 19:41)
iv. azotado (Jer. 20:2; Jn. 19:1)
v. burla (Jer. 20:7; Lam. 3:14)
vi. sangre inocente (Jer. 26:15; Mat. 27:4)
vii. abandonado (Lam. 3:8; Sal. 22:1)
viii. no sentado en compañía de burladores (Jer. 15:17; Sal. 1:1)
ix. maquinaciones en su contra (Jer. 18:18; Mat. 26:59)
x. rechazado por los suyos (Jer. 20:10; Jn. 1:11)
xi. intercesor (Jer. 42:2; Heb. 7:25)
2. Cristo en las palabras de Jeremías:
i. Fuente de agua viva (Jer. 2:13; 17:13; Jn. 4:14; 7:37,38)
ii. Pastor (Jer. 23:3, 4; Jn. 10:11)
iii. Rey (Jer. 23:5, 6; Ap. 19:16)
iv. Médico (Jer. 8:22; Isa. 53:4)
v. Renuevo de justicia (Jer. 33:15)
vi. Redentor (Jer. 50:34; 1 Pe. 1:18)

Foto por Andre Blanco en http://www.unsplash.com