Comprobando la Deidad de Cristo – Exegéticamente

David R. Alves

La deidad de Cristo se refiere a su naturaleza divina. O sea, Cristo es Dios.

El Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo son co-iguales (cada uno es Dios), co-eternos (cada uno existe sin principio ni fin), y coexistentes (los tres existen al mismo tiempo). No son tres dioses. Es un solo Dios en tres personas.

En las Escrituras abundan maneras de comprobar la deidad de Cristo. Aquí nos vamos a valer de la exégesis para ver lo rico que es el texto inspirado y lo preciso que es el Griego en que fue escrito el Nuevo Testamento. 

La exégesis consiste en interpretar el significado del texto (mientras que la eiségesis involucra inyectar opiniones personales). 

Necesitamos entender que:

1. Los sustantivos nombran cosas, personas, animales, conceptos.
2. Un sustantivo personal se refiere a oficio (sacerdote), dignidad (señor), afinidad (padre), atributos (santo), etc.
3. Un sustantivo propio se refiere a nombres propios, como Juan, Jesús, Pedro.
4. La conjunción copulativa “y” es una palabra que une, o relaciona a otras. Por ejemplo: Dios y Salvador.

Un británico llamado Granville Sharp (1735-1813) notó algo impresionante en la gramática griega. Se conoce hoy cómo la regla Granville Sharp. 

Básicamente, dicha regla dice así:

Cuando una construcción gramatical contiene dos sustantivos personales unidos por la conjunción “y”, siendo el primer sustantivo antecedido por el artículo definido (en cualquier a de sus formas) sin que dicho artículo se repita antes del segundo sustantivo, entonces este último sustantivo se refiere, o describe, a la misma persona. 

Tres condiciones deben darse:

1. Los dos sustantivos son personales (oficio, dignidad, afinidad, atributos, cualidades, etc.)
2. Los dos sustantivos están en el mismo caso (Genitivo, por ejemplo).
3. Los dos sustantivos están en singular.

Dos citas bíblicas que son contundentes (¡hay más!):

Tito 2:13 (RVR60): “aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo.”

Literalmente:

“el gran Dios nuestro y Salvador Jesucristo”.

1. Un solo artículo definido. Precede solamente al primer sustantivo personal.
2. Dos sustantivos personales en Caso Genitivo.
3. La conjunción copulativa que une a los dos sustantivos.

Conclusión: 

El gran Dios nuestro es nuestro Salvador Jesucristo. O sea, ¡Cristo es Dios!

2 Pedro 1:1 (RVR60): Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo,

Literalmente:

“el Dios nuestro y Salvador Jesucristo”.

1. Un solo artículo definido. Precede solamente al primer sustantivo personal. 
2. Dos sustantivos personales en Caso Genitivo.
3. La conjunción copulativa que une a los dos sustantivos.

Conclusión:

El Dios nuestro es nuestro Salvador Jesucristo.

Pablo y Pedro concuerdan en que Cristo es Dios.